
Nueve tractomulas transportaron desde el puerto de Barranquilla hasta los talleres del Metro de Medellín un total de 290 barras de rieles, equivalentes a 5.200 metros de vía férrea. Este cargamento, fabricado en un acero especial endurecido en Austria e importado a través de Amberes, Bélgica, será utilizado para reemplazar tramos de las líneas A y B en 2025.
Cada barra de riel tiene un peso aproximado de 972 kilogramos, y su instalación requerirá procesos de soldadura aluminotérmica que alcanzan temperaturas de hasta 2.000 grados Celsius.
Mantenimiento predictivo y preventivo
El cambio de rieles forma parte del mantenimiento predictivo, preventivo y correctivo que el Metro realiza anualmente para mantener la vía férrea en óptimas condiciones. Los rieles son reemplazados debido a la pérdida de perfil, desgaste y defectos superficiales causados por el constante paso de los trenes.
Esta importación, una de las más grandes realizadas en los 29 años de operación comercial del sistema, busca garantizar la seguridad y eficiencia de los 80 trenes que conforman la flota actual del Metro de Medellín.
Para finales de 2024, la Empresa proyecta haber reemplazado 3,2 kilómetros de rieles, siguiendo inspecciones visuales, radiográficas y pruebas de ultrasonido que se realizan regularmente fuera del horario de operación comercial.
Otras actividades de mantenimiento
Además del cambio de rieles, el Metro de Medellín lleva a cabo otras labores de mantenimiento, como el reperfilado de rieles, que elimina defectos superficiales y extiende su vida útil, y el bateo de la vía, que restablece la nivelación, compacta la piedra triturada y estabiliza la infraestructura ferroviaria.
En 2024, el Metro destinó aproximadamente $200.000 millones al plan anual de mantenimiento, reafirmando su compromiso con la seguridad y la calidad del servicio para los miles de usuarios que diariamente utilizan el sistema.