
EPM adelanta un plan de modernización, ampliación y construcción de infraestructura de acueducto y alcantarillado en el Valle de Aburrá y el Oriente antioqueño, con una inversión que supera los 600 mil millones de pesos en 2025. El objetivo es garantizar que más de 5,5 millones de personas cuenten con agua potable y soluciones de saneamiento hacia 2044.
Las obras comprenden la modernización de plantas de potabilización como Manantiales y La Ayurá, la reposición de más de 26 kilómetros de redes en Medellín y Bello, la construcción de nuevos tanques de almacenamiento y bombeos de respaldo, además de 54,2 kilómetros de redes de alcantarillado en quebradas como La Iguaná y La García.
En Barbosa se levanta una nueva captación de agua en la quebrada Ovejas, que garantizará el suministro a 8 mil hogares durante los próximos 50 años. En Rionegro y El Retiro se invierten 37 mil millones de pesos en tanques y sistemas de saneamiento, destacándose la construcción de la PTAR Tranvía con capacidad de tratamiento de 320 litros por segundo.
“Estas son inversiones que se traducen en bienestar y salud pública para los habitantes del Valle de Aburrá y el Oriente. Nuestra meta es anticiparnos a los retos de las próximas décadas con proyectos sostenibles y eficientes”, explicó Santiago Wilches Yepes, gerente de Acueducto y Alcantarillado de EPM.