El Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina cuenta con la tercera Barrera Coralinamás grande del mundo, la cual se ha visto afectada por la contaminación y la explotación indiscriminada.
El Archipiélago colombiano aumenta la alerta y llama al compromiso por el cuidado de los arrecifes coralinos. Así quedó claro en el último evento organizado por Chevron Colombia y la organización Blue Indigo, que contó con la participación de representación de la Gobernación de San Andrés, comunidad y líderes de opinión de otras regiones del país.
La alerta que dio el gobernador de San Andrés junto a Blue Indigo Foundation, frente a la preocúpate situación de la tercera barrera coralina más grande del mundo, es preocupante «La situación de los corales en el Caribe requiere una acción inmediata y coordinada. El blanqueamiento de los corales es un claro indicador del cambio climático y la degradación ambiental que está ocurriendo en nuestros océanos. Debemos actuar ahora para proteger estos ecosistemas que son parte fundamental de nuestra Reserva de Biosfera Seaflower, y que benefician a toda Colombia». afirmó Nicolas Gallardo Vásquez, Gobernador del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina
Los corales son fundamentales para los ecosistemas marinos, sosteniendo al menos el 25% de la de la diversidad de los océanos.
¿Pero qué son los corales?
Los corales no son plantas, sino animales que se asocian a ellas: son animales cuyo esqueleto hacen que parezcan rocas, están cubiertos por algas que les dan el color y producen la comida que necesitan para sobrevivir.
En los últimos años, ha aumentado la preocupación por el blanqueamiento de los corales, un proceso en el que estos organismos pierden las algas simbióticas que les proporcionan energía y color, lo que puede llevarlos a la muerte.
Este fenómeno devastador amenaza la biodiversidad y la sostenibilidad de estos ecosistemas marinos de los cuales las comunidades y la economía dependen para el desarrollo de actividades costeras, como la pesca y el turismo. Un ejemplo destacado de esto es San Andrés y toda la región del Caribe, donde cada año miles de turistas son atraídos por la oportunidad de bucear en estos ecosistemas marinos. El turismo representa el 98% de la economía de la Isla.
“El año pasado, participantes de entidades gubernamentales, ONG, líderes ambientales y Chevron Colombia monitorearon 1.200 m2 de arrecifes en Providencia y Santa Catalina donde encontraron que los corales duros tuvieron una presencia baja en los sitios, alcanzando el 8% de cobertura. Además, se observaron también colonias con enfermedades como plaga blanca y otros síndromes blancos marcados en los puntos Suky Drum y Basalt Key”, explicó Alejandro Riveros, gerente de Asuntos Corporativos de Chevron Colombia.
El Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina abarca territorialmente 180,000 km2 y cuenta con cerca de 313,795 hectáreas de arrecifes de coral. Esto representa el 91% de las áreas coralinas de Colombia y lo consagra como la tercera barrera coralina más extensa del mundo, así como la segunda en el continente americano. Lamentablemente, estos espacios han sufrido impactos negativos en los últimos años debido a la contaminación y el aumento en la temperatura de los océanos.