Se expanden, se meten en la mente y contagian la sangre. No son virus, son memes, son imágenes superpuestas por textos que están logrando conquistar los lugares más altos del mundo del internet.
Pero, ¿qué es lo que tienen estas imágenes que tanto nos gustan? La respuesta no es la estética, pues a veces se les perdona que sean feos. Tampoco es una estrategia de comunicación elaborada, porque no tienen normas fijas y mucho menos su utilidad, porque a veces no sirven de mucho.
Alan Lazalde, profesor de la Universidad Iberoamérica de México y estudioso de estas imágenes afirma que su éxito comunicativo se debe a tres razones: «Primero, funcionan como símbolos de un lenguaje altamente expresivo y económico. Segundo, se potencian en las redes sociales y multiplican el número de conexiones entre personas . Tercero, porque las herramientas para su creación digital son cada vez más accesibles».
Los memes son entonces virilidad y conexión social, que se traducen en imágenes con poder simbólico que tienen el potencial de ser transmitidas entre varias mentes e incluso, entre varias culturas.
¿Qué hay detrás de la cara del forever alone? ¿Cuál es la magia de los gatos? ¿Por qué un hombre sin rostro se vuelve tendencia en las redes sociales? Nos dimos a la tarea de desarmar los memes, los cuales, incluso, se entienden dentro de una rama del conocimiento llamada memética y que, contrario a lo que muchos creen, no es nueva, nació en 1976 y está en constante mutación, evolución reproducción y competencia.
Perta Toro Castaño… Periodista….. El Colombiano…
