La empresa logra su compromiso de ser plástico y carbono neutro en 2022, al lograr disminuir en un 25% la emisión de CO2.
Alpina cumplió con el objetivo trazado, logro recoger la misma cantidad de plástico que puso en el mercado y además neutralizar las emisiones de gases de efecto invernadero, como los suscribió durante el lanzamiento de su nueva esencia hace dos años.
Cuando Alpina lanzo la nueva esencia, se propuso 18 compromisos de sostenibilidad. “En 2022 teníamos la meta de neutralizar nuestra huella de carbono y plástico. Sabemos que nos falta mucho para equilibrar este impacto. Pero estamos muy felices de compartir los avances que hemos tenido en este frente. Hoy podemos decir que somos una empresa plástico y carbono neutro y esto se ha logrado gracias a acciones concretas entre, alpinistas, aliados comerciales, proveedores, agricultores, ganaderos y recicladores de oficio”, resalto, María Emilia Osuna Reyes, Analista de Sostenibilidad, de la productora de Lácteos, ubicada en Sopo, Cundinamarca.
Las emisiones de carbono y el uso del plástico hacen parte de los desafíos a nivel mundial en materia de calentamiento global. Según el informe de Global Carbon Project, presentado en el marco de la XXVI Conferencia de las Partes de la Convención Marco del Cambio Climático de la ONU (COP27), las emisiones globales de CO2 alcanzarán un récord con 40.600 millones de toneladas anuales. Por otro lado, WWF afirma que actualmente 11 millones de toneladas de residuos de plástico entran a los océanos y el ciclo de vida de este material genera 1.800 millones de toneladas de gases de efecto invernadero al año.
Para logra las metas trazadas la compañía ha venido realizando y ha cumplido con varias estrategias.
En los últimos 10 años, la compañía ha disminuido en un 25% la emisión de CO2 y, además, generó un sistema de control de información y gestión de la huella de carbono.
De manera complementaria y para lograr su certificación de neutralidad reconocida por Instituto Colombiano de Normas Técnicas y Certificación (ICONTEC), la empresa adquirió bonos de carbono que promueven proyectos de reforestación y conservación en un área equivalente a 2.700 hectáreas de bosque que proveen aproximadamente 32.400 toneladas de oxígeno.
Y a lo anterior se le agrega que la planta de biogás de Sopó, que genera energía a partir de tratamiento de aguas residuales, suple más del 30% de la demanda eléctrica de la planta de Sopó.
Hacia adelante, Alpina seguirá trabajando en energías renovables no convencionales que permitan avanzar en la reducción de emisiones.
Empaques amigables.
Tres son las acciones que la empresa desarrolla buscando que los empaques sean más amigables. Y es don José Isidro González Roso, operario de Gestión Ambiental el encargado de contarlo.
- De la mano de Veolia y cerca de 450 recicladores de oficio, recolectamos y transformamos plástico equivalente a 18 monumentos de Cristo Rey en Cali.
- Además, disminuimos su uso. Por ejemplo, fuimos la primera empresa en implementar pitillos de papel en nuestros productos.
- Las botellas de Yox disminuyeron su peso, evitando el uso de plástico al año.
Con el fin de reincorporar plástico reciclado o disminuir el uso de este material, desde 2020, por medio de la reducción del 13% del calibre de bolsas UHT formatos familiares en productos como bolsa en leche, Yogo Yogo, Yogurt, entre otros, se dejaron de poner en el mercado 18 toneladas de plástico.
En 2021, se redujo un 18% adicional. Estos esfuerzos continuaron con la reducción del 41% en el peso de los vasos de 150 y 200 gramos de Kumis, Yogurt Original, Regeneris y Yogurt Finesse, con el cual se dejaron de poner en el mercado cerca de 130 toneladas de plástico.
Adicionalmente, en el frente de innovación en los empaques, la compañía le sigue apostando a que estos sean fabricados con materiales biodegradables y reciclables. Frutto de Alpina fue la primera marca en el país que dejó de usar pitillos plásticos y los reemplazó por pitillos de papel, así mismo reincorporamos el 25% del material reciclado en todas sus botellas PET y también reincorporamos hasta el 75% de plástico reciclado en nuestras sobrecopas de Bon Yurt.
Además, reemplazó en referencias de Kumis y otros vasos acartonados, las etiquetas plásticas por etiquetas de bagazo de caña, que cuentan con una menor huella hídrica y de carbono al ser un subproducto del proceso de fabricación de la caña. A futuro, la compañía continuará implementando acciones para la reducción, reincorporación y aumento del índice de reciclabilidad de sus empaques.
“Alpina ha estado y seguirá comprometida con el avance en materia ambiental. Conscientes de que falta camino por delante, también nos da orgullo compartir estos momentos en los que estamos demostrando nuestro compromiso con el cumplimiento de objetivos de desarrollo sostenible. Seguiremos trabajando y aprendiendo de la mano de aliados y consumidores para honrar nuestro propósito de nutrir un mundo más sostenible para darle sabor a la vida”, afirmó Nicolás González, director de asuntos corporativos de Alpina.
Para Alpina este es solo el comienzo, pues todavía hay un largo camino por recorrer en materia ambiental. La compañía continuará trabajando por cumplir sus 18 compromisos de sostenibilidad, en los que se destacan trabajar por una ganadería sostenible, contribuir a la nutrición de Colombia, desarrollo del campo, entre otros, para seguir construyendo un mundo delicioso.