Para que la paz sea posible en Colombia, necesitamos dialogar, dialogar mucho
Fe, fue lo que pusieron 11.3 millones de colombianos el pasado 19 de junio de 2022, para entregarle el poder de gobernar las dos Colombias, a Gustavo Francisco Petro Urrego, el hombre nacido en Ciénaga de Oro, Córdoba, pero, que su vida la vivió y desarrollo en Zipaquirá. Y parece que así lo entiende el hombre que hizo parte del M19, hoy jefe de Estado, quien en su discurso manifestó: “aquí está, como en el recorrido de mi existencia, el pueblo. Las manos humildes del obrero. Aquí están las campesinas y las que barren las calles. Aquí están los corazones del trabajo, las ilusiones de quien sufre, aquí están las mujeres trabajadoras que me han abrazado siempre cuando decaigo, cuando me siento débil, el amor al pueblo, a la gente que sufre excluida, es ese amor el que me mantiene aquí para unir y construir ahora una nación”.
Domingo, 7 de agosto, un día luminoso en la capital del país, Santa Fe de Bogotá. La Plaza de Bolívar estaba lista para recibir a cerca de 100 mil almas que acompañarían al primer presidente de izquierda en la tierra de la democracia.
Fue un acto cargado de simbolismos, desde los trajes de las mujeres que acompañaron al presidente No42, pasando por los videos del himno Nacional o el que le rindió homenaje a las victimas del conflicto y sus familias, La banda presidencial impuesta por la senadora María José Pizarro, la hija de Carlos Pizarro- líder del M19, quien lució una chaqueta roja tejida, con el rostro de su padre en la espalada acompañado de un mensaje, “que la lucha por la paz no nos cueste la vida”, para finalizar en los discursos de posesión. Y claro, la espada del libertador, como el signo de libertad y unida. El primero, lo realizo el presidente del Senado, Roy Barreras, el cual giro en torno al conflicto, los dolores, miedos, destierros y angustias de un país. Y los actos de esperanza ofrecidos para todos, victimarios y victimas, para la Colombia rural y urbana. Para volver a creer en la democracia. “Lo que vinimos hacer hoy: intentar parar la muerte y convertir a Colombia en una potencia mundial de la vida. Intentar sanar esas heridas, a eso vinimos hoy. Para sanarlas hay que conocerlas, hay que recordarlas, hay que saber cuál es esa verdad y qué la causa. De allá venimos, venimos de una historia en la que ha habido voces valientes que han levantado el reclamo popular pero que sólo ahora encontraron el camino de la reivindicación”, un fragmento de 100 Años de Soledad.
Mientras en diferentes plazas del país y de la capital, hombres y mujeres que vivían la fiesta a punta de música y danza, esperaban las palabras del exguerrillero- economista, que a nombre del pueblo combatió la institución en los años 70, ahora, por mandato popular desde el 7 de agosto de 2022 representa la institución. En la Plaza principal, corazón de Bogotá, todo estaba listo para escuchar lo que sería su hoja de ruta para los cuatro años de gobierno
La espada de Bolívar
Luego de juramentar ante 100 mil ciudadanos, invitados especiales y el país. El primer acto de gobierno fue ordenar el ingreso de la espada del libertador Simón Bolívar. La espada del pueblo. La misma, que en 1974 El M 19, el grupo guerrillero creado por Jaime Bateman, “la toma prestada” de la Quinta de Bolívar, la que el expresidente Duque no dejo sacar de la Casa de Nariño. Finalmente, custodiada por cuatro guardas de presidencia y en una urna de vidrio, la espada llego a la tarima. “Esta espada representa demasiado para nosotros y para nosotras y quiero que nunca más esté enterrada», dijo Petro al iniciar su discurso, el primero como presidente este domingo. Y agrego: “que solo se envaine, como dijo su propietario, el libertador, cuando haya justicia en el país. Que sea del pueblo. Es la espada del pueblo”… y el pueblo grito ¡Petroooo… Peeetro!.
Han pasado 200 años de vida independiente de un país, que, en medio del conflicto, solo ha tenido retazos de paz. Se espera la paz. En la tierra donde el ser humano descubrió el maíz, el hijo de Clara y Gustavo, el hermano de Adriana y Juan. El esposo de Verónica, el papá de Nicolás, Andrea, Nicolás, Andrés, Sofia y Antonella, inicio el gobierno de lo posible. “Estamos acá contra todo pronóstico, contra una historia que decía que nunca íbamos a gobernar, contra los de siempre, contra los que no querían soltar el poder. Pero lo logramos. Hicimos posible lo imposible. Con trabajo, recorriendo y escuchando, con ideas, con amor, con esfuerzo. Desde hoy empezamos a trabajar para que más imposibles sean posibles en Colombia. Si pudimos, podremos”, manifestó.
Fue un discurso cargado, muy cargado de paz. Paz, para reconciliar. Para la paz ambiental. Paz para darle una segunda oportunidad a la lucha contra las drogas. Para la igualdad. Paz para la equidad. Para el campo paz. Para enfrentar las diferencias ideológicas y trabajar juntos. Paz para la unidad Latinoamericana.
Los 10 mandamientos de Petro.
- Trabajare por conseguir la paz verdadera
- Cuidaré de nuestros abuelos y abuelas, de nuestros niños y niñas, de las personas con discapacidad, de las personas a las que la historia o la sociedad ha marginado.
- Gobernaré con y para las mujeres de Colombia
- Dialogaré con todos y todas sin excepciones ni exclusiones
- Escucharé a las colombianas y colombianos como he venido haciéndolo en todos estos años.
- Defenderé a las colombianas y colombianos de la violencia y trabajaré para que las familias se sientan seguras y tranquilas.
- Lucharé contra la corrupción con mano firme y sin miramientos.
- Protegeré nuestro suelo y subsuelo, nuestros mares y ríos. Nuestro aire y cielo.
- Desarrollaré la industria nacional, la economía popular y el campo colombiano.
- Cumpliré y haré cumplir nuestra Constitución.
“Se acabaron los «no se puede» y los «siempre fue así». Hoy empieza la Colombia de lo posible. Hoy empieza nuestra segunda oportunidad”. ..Gustavo Petro… Presidente de Colombia 2022- 2026