Cerca de 500 niños y niñas han recibido pedagogía sobre la importancia de cuidar los territorios y su ocupación segura y confiable para las familias.
“Había una vez 3 cerditos que eran hermanos y vivían en lo más profundo del bosque. Siempre habían vivido felices y sin preocupaciones en aquel lugar, pero ahora se encontraban temerosos de un lobo que merodeaba la zona. Fue así como decidieron que lo mejor era construir cada uno su propia casa, que les sirviera de refugio si el lobo los atacaba”, así, inicia el cuento de los Tres Cerditos, de James Orchard Halliwell.
Inspirado en este tradicional cuento la Alcaldía de Medellín, y el equipo psicosocial del programa Construye Bien, de la Secretaría de Gestión y Control Territorial diseñó una estrategia, con la que están llegando a las 16 comunas y los cinco corregimientos de la ciudad para enseñar de manera especial a los menores de una manera lúdica, ilustrativa y asertiva la forma correcta de construir y ocupar el territorio legalmente
La razón para llegar con la iniciativa a la primera infancia, según la Alcaldía ellos son los principales replicadores del mensaje de sensibilización en los hogares. Hasta el momento cerca de 500 niños y niñas han participado de los talleres sobre la importancia de los territorios y la ocupación segura y confiable para las familias.
Al respecto, el Subsecretario de Control Urbanístico, Carlos Trujillo, manifestó: “bajo esta estrategia de adaptación del cuento del Lobo feroz y los tres cerditos, nosotros lo que creamos es como ese entorno de construcción segura, que permita a las familias ocupar el territorio de una manera responsable. Y los niños al final se van convirtiendo en esa masa critica que queremos crear a largo plazo, sino que además los niños están cuestionando a sus padres. Y sobre todo, son ellos los que están replicando el mensaje a todas sus familias”.
El funcionario, agregó que la ocupación correcta reduce riesgos de accidentes, evita costos de demolición o multas, además permite que Medellín crezca de manera armónica, respetando las zonas verdes y áreas de protección ambiental.
Milena Velásquez, agente educativa del Jardín La Huerta del corregimiento de San Cristóbal, zona donde se han impactado con el programa a 605 personas, destaca la importancia de este tipo de actividades: “los niños se divirtieron y aprendieron en donde realizar construcciones seguras para sus hogares, lo importante de cuidar y saber dónde deben realizar cuidados por nuestra casa y todo lo correspondiente a la protección personal y riesgos territoriales”.
Con esta apuesta se fomenta el crecimiento de forma regulada y segura con un enfoque pedagógico y lúdico para la preservación del patrimonio individual y del medio ambiente involucrando a la familia. Yuri Marcela Ciro, madre usuaria del Jardín La Huerta, manifestó: “nos visitaron de la Alcaldía de Medellín para enseñarnos dónde construir para no tener riesgo de que la casa se nos caiga, de cuidar bien el espacio donde se va a construir. Me parece bien que desde niños aprendan cómo es el proceso de edificar en un espacio seguro”.
Por último, desde el Distrito se hace un llamado a la ciudadanía a la legalidad, para que sus viviendas sean espacios seguros y sostenibles para todos. Y no terminen sus viviendas en el piso como la del cerdito, que construyó con paja su casa, o de madera para hacerla un poco más segura pero igual cayó, mientras que la tercera se fabricó con ladrillo, más resistente y difícil de tumbar. Total, que, al lobo solo le bastó soplar para tumbar dos, mientras que la tercera no pudo derribar, sino que fue el refugio de los cerditos damnificados. Moraleja.. Si una vivienda segura y digna para vivir quieres tener, con las normas la debes construir.
